Un ferrocarril por cable es un tipo de ferrocarril que utiliza un cable, cuerda o cadena para transportar trenes. Es una clase específica de transporte por cable, que se caracteriza por utilizar vías sobre carriles y por emplear un sistema de tracción por cable que permite prescindir de locomotoras.
El uso más común de un ferrocarril por cable es mover vehículos en una pendiente pronunciada, demasiado empinada para poder utilizar locomotoras convencionales. Esta forma de ferrocarril por cable es a menudo llamada una rampa o plano inclinado. Un tipo común es el funicular, un ferrocarril de pasajeros en un recorrido aislado, donde los coches están unidos permanentemente al cable.[2] En otros sistemas, los vagones se conectan y se separan de los extremos del cable, o incluso se transportan sobre plataformas. Algunos ferrocarriles por cable no están fuertemente inclinados, y a menudo se usan en grandes instalaciones (como puertos, plantas industriales o canteras) para mover largas composiciones de vagones a distancias relativamente cortas, sin necesidad de utilizar locomotoras.